miércoles, 23 de diciembre de 2020

Una Biblioteca Rolera os desea unas felices fiestas

Respondiendo a la pregunta que os estaréis haciendo todos al comenzar éste artículo: Si, éste es uno de esos artículos navideños para cerrar el año. No hay trampa ni cartón.

En primer lugar y principal motivo de sentarme a escribir aquí, quiero desearos unas felices fiestas. Este año, que tenía tantas papeletas para ser bueno siendo un número tan bonito, ha resultado un año obviamente malo, nefasto en un sentido tan amplio que cualquier intento de resumen se quedaría corto. Dejo ese tema para quienes redacten los libros de historia - ¡suerte! - porque, aunque hay quien dice que 2020 ha sido un año para olvidar, realmente pienso que es un año para recordar y destacar en los anales de la humanidad. Desde aquí propongo que, a semejanza de aquella maldición - erróneamente atribuida a los chinos, al parecer - que dice "ojalá vivas tiempos interesantes", comencemos a decir por estas tierras "ojalá vivas un 2020" para expresar algo similar.

Paradójicamente, este año ha sido el que más he jugado más a rol en muchos. Tengo que remontarme a 2014 para igualar las 27 sesiones que he jugado o dirigido en 2020, y el aumento ha sido gracias a habernos animado (a la fuerza) a jugar a rol por internet. Ocho sesiones de esas 27 han sido mediante plataformas de juego online (mas dos que fui el único jugador telepresenciado) y, aunque sigo prefiriendo jugar en persona sin duda, para mi se ha abierto una puerta que espero conseguir dejar abierta cuando la pandemia haya pasado.

Aparte de eso, casi ha pasado un año desde que decidí abrir éste blog. Como sabéis, la idea principal era recuperar entradas del desaparecido Fragmentos de Rol que pienso que merece la pena dejar flotando en internet por si le resultan útiles a alguien. A lo largo del año he ido recuperando algunas, muy poco a poco. Nunca me planteé, como con aquél, tener en Una Biblioteca Rolera un ritmo X de publicación. Estaría bien, pero mi prioridad es jugar, no contar a lo que juego ni cómo juego. Me gustaba colgar aventuras para quien pudiera venirle bien, pero ya no dispongo de tiempo para eso. Es más, diría incluso que la musa rolera se ha vuelto perezosa, o que nos hemos distanciado un tanto, porque no ando con demasiada inspiración. Pero como todo, son etapas, y ya regresará con fuerza cuando... bueno, cuando apetezca que regrese. Mientras tanto seguiré recuperando algunas de esas entradas, aderezándolas cuando pueda y pegue con algo nuevo o reseñas de libros y novelas que voy despachando.

No quiero alargarme más de lo necesario. Lo importante: disfrutad de las fiestas quienes podáis hacerlo, paciencia para quienes no podáis. Descansad, pasadlo bien y, por encima de todo, estad bien y manteneos a salvo de todo aquello que sabéis que debéis evitar en estas fechas, atendiendo a la que está cayendo.

martes, 15 de diciembre de 2020

Aventura para Dark Heresy - Cosecha Negra

NOTA DEL BIBLIOTECARIO: Vamos con otra entrada reciclada, sacada del Fondo Antiguo, para recuperar material rolero. Al hilo de la etérea posibilidad de volver a traer a la mesa Dark Heresy, comparto de nuevo una de las aventuras que dirigí durante una época en la que fue el juego al que más jugué o dirigí. Espero que os guste.

Entrada publicada originalmente en Fragmentos de Rol el 01/07/2013 (revisada y actualizada el 29/11/2020)

"No existe paz en las estrellas, tan sólo una eternidad de masacre y destrucción en la que resuenan las carcajadas de unos dioses crueles e insaciables. Olvida el poder de la tecnología y la ciencia, pues gran parte se ha olvidado para no ser recordada jamás. Olvida las promesas de progresos y descubrimientos, pues en este futuro siniestro y despiadado... no hay más que guerra."

Esas eran las últimas palabras del audio que Edge colgó en su web cuando presentó Dark Heresy, el primer juego de rol de la última hornada ambientado en el universo de Warhammer 40.000, y al cual pertenece la aventura que traigo hoy: Cosecha Negra.